¿A qué juegan? – Ricardo Gabriel Cipagauta Gómez #Columnista7días
Desde niños la mayor aspiración -o por lo menos lo que respondemos, en medio de los juegos- es ser el presidente de la nación, porque tenemos la capacidad de querer mejorar las cosas, buscar liderar causas para todos, ser parte del poder, tomar decisiones para muchos, disponer de recursos para obras e inversiones y hasta saciar el ego, con compañeros o amigos… y a punta de adulaciones -ya con la mayoría de edad- aspiran a todo y se convierten en los “gamonales” dañinos.
Valdría la pena que los educadores -en su tiempo de trabajo- dispusieran de horas cátedra para entronizarnos el valor de ser líder, de encaminarnos por ser el eje de procesos, de convocar a los de su generación -y otras- a construir fórmulas de soluciones, a proponer alternativas y ser dolientes de esas que reclamamos a un sistema que ya lleva más de 200 años, y que debe ser fortalecido, para que, con una fuerte formación de principios en ideologías, no tengamos tantas debilidades, en nuestro ordenamiento social. Como país no podemos ser ruedas sueltas, sin un rumbo concreto.
¡Basta! con ver lo que en las últimas horas sale al aire, al ambiente, en las noticias y hasta desde las campañas, son arsenales de amenazas y motivaciones -injustificadas- para salir a cumplir posibles desmanes, alteraciones, ataques, y llegamos a banalizarlas, y con violencia no se puede empezar un cuatrienio -que debe ser de recomposición económica, social-, y llegar a cambios y ajustes políticos en todos los niveles. Esto no es un juego de niños, no hay tantos dulces o golosinas para premiar.
Tonos de agresividad -rayando en la intimidación- y hasta utilización de lazos familiares para tratar de ser creativos culmina con desprecio, aborrecimiento de las maneras y estrategias que han impuesto para una campaña que ha debido ser de alegrías, señalamientos entre “amigos” y seguir jugando a ser el que de seguro no será, ya ocupando la máxima distinción de nuestro sagrado voto.
Estresados estamos, no lo podemos negar, por culpa de defender esa democracia, las instituciones y un sistema que debemos moldear para mejorar nuestros entornos y nivel de vida, para afianzar procesos que no todos han sido fallidos, apartar las malas prácticas o a sus practicantes y no repetir lo que se sucede en la vecindad, en la lejanía de la guerra y hasta en proselitismos irrepetibles.
Condicionar o imponer con cartas sacadas para saludar y conmover, deja la duda si será cierta tanta elocuencia para tratar de desmentir rumores de ciertos riesgos extremos, que nos pueden estar rondando e incluso utilizando la nobleza de niños, que ni en sus inocentes juegos hacen tanto daño.
Prisioneros o secuestrados no queremos estar por salvadores camaleónicos, necesitamos y nos urge tener un líder, un componedor y un estratega que delegue, que ponga tareas y que junto con su vice puedan recomponer lo que entre unos pocos desordenaron, desbarajustaron y usurparon.
Pasará a la historia la primera elección a punta de redes sociales y bajándole el nivel a la incertidumbre, todo por el pésimo y absurdo descontrol de las que bautizaron como “bodegas” para referirse a la manipulación de contenidos y penetración de ciertas redes sociales, por desquiciados que ordenan correr las líneas de la ética, para poderle cumplir lo prometido a sus clientes y dejar a la deriva a incautos y activistas deslumbrados.
El domingo Colombia dará un giro en sus procesos de nación y en ello somos 39 millones los habilitados para darnos nuestra gobernabilidad, sin fuerzas externas, y dar ejemplo votando. YA.
Ricardo Gabriel Cipagauta Gómez. @ricardocipago
https://boyaca7dias.com.co/2022/06/15/a-que-juegan-ricardo-gabriel-cipagauta-gomez-columnista7dias/
No hay comentarios:
Publicar un comentario