PREGONES Clausuras y Balances

 Clausuras y Balances – Ricardo Gabriel Cipagauta Gómez #Columnista7días

30 de noviembre de 2022

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Para estas emocionantes fechas se cumplen con la protocolarias y “obligadas” reuniones para conocer de los balances e informes de gestión, clausurar programas y proyectos, rendir cuentas y hasta ajustar los planes de acción, de actividades, y dejar los presupuestos ajustados a lo que dan la estabilidad y tranquilidad para afrontar el nuevo período, año, meses e incluso se les convierte en la cuenta regresiva para su cierre de cuatrienio y para otros la de hacer anuncios de sus aspiraciones o ambiciones de dirigir lo público.

Desde las instancias privadas se llega a equívocos de asimilar la toma de decisiones con las formas en las que se hacen –por estrategias o rutinas o estratagemas- en los recintos de concejos, asambleas, cámara de representantes y senado, en el sentido de que como allí se tienen ciertos procedimientos (parlamentarios) para mover las leyes, así como intereses, y dejando sensaciones que sin consideraciones o miramientos es que se imponen las llamadas “aplanadoras o pupitrazos” para satisfacer anuncios, compromisos o a los que cual venganza se satisfacen con imponerse, sin medir distancias.

A lo mejor son contados los casos, sumando los dedos de manos y pies, pero lo que sí trasciende es que el resultado final demuestra que las mayorías son las que mandan. Pero mandadas a recoger son las formas en las que se “cocinan” ciertos niveles de salir a comunicar de cómo se aprueban las que van a ser las banderas, políticas, soluciones, sombrillas y hasta panaceas y con atrevimiento prometer lo inalcanzable.

La perorata anterior para lamentar que no hacemos uso de las herramientas de control ciudadano a tantos “personajes” que se van metiendo en las escalas del poder. Que se convierten en los “jefes” y que ya en esas escalinatas van cambiando. Que ya ni responden los saludos o mensajes para saber si es posible un tinto, el que se acordó en las euforias de las campañas. Que figuran en medios locales y regionales a punta de amañadas entrevistas, encuestas y sondeos para saber si hay o no recordación o no dejarse desvanecer por los problemas del diario. Que son fogonazos de recoger regalos y redistribuirlos entre los más necesitados. En fin, es que ya no han podido cambiar sus actuares y solo los multiplican en las redes sociales y pagan –o dejan de pagar- el trabajo profesional que utilizaron para saciarse de poder, y hoy con sonrisas, no pagan.

Todos al sabor de una refrescante cerveza, un fino wiski, un compartir de cierre de año, no se evade el  tema de con rabia pedir el balance a los que se fueron, a los que llegaron o a los que ilusos piensan que pueden llegar a emular a su amigotes, jefes, patronos o entornos para salir entonados-embriagados de nada de resultados sino meras promesas y ver pavonearse a quienes juran y ‘rejuran’ que son los adalides de causas nobles, de elefantes blancos, de darle lustre a la identidad mediante el restablecimiento de los derechos de ancestros, de asignar los recursos y los espacios para que se conviertan en realidad y todo para que no se deje para el fin de año y así salir del paso, cumplir por cumplir y dejar el sinsabor que no hay unos propósitos  unificados, sino que cada quien hace o deshace, para dejar su huella.

Vamos clausurando sueños, haciendo balances en todos los niveles, y los resultados serán los que nos impongan una serie de retos para que dentro de 365 días no tengamos que decir que no pasó nada…

* Ricardo Gabriel Cipagauta Gómez.  @ricardocipag

https://boyaca7dias.com.co/2022/11/30/clausuras-y-balances-ricardo-gabriel-cipagauta-gomez-columnista7dias/

PREGONES Golazos sin jugar

Golazos sin jugar – Ricardo Gabriel Cipagauta Gómez #Columnista7días

23 de noviembre de 2022

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No han transcurrido la docena de partidos del discutido mundial de fútbol de Catar 2022 y la agenda noticiosa, real, de lo que sucede en el mundo choca con definir con grupo elite, poner fecha para definir el salario mínimo, terremotos en el otro lado del mundo, “baja” del dólar, ganar clásicas de ciclismo y medalla de bronce, reuniones por provincias, siguen los cambios en los gabinetes y los nombramientos, reabren vías sin encontrar una víctima, anuncian entrega de galardones, comienzan diálogos de negociaciones de la paz, se clausuran procesos y hasta se interrumpen transmisiones de noticieros para anunciar un gol, patrocinado.

Es una ruleta que se vive hora a hora, minuto a minuto y que se va convirtiendo en una amplia cancha, escenario, mesa de juego, donde se definen tantas cosas y al parecer son unos pocos los que nos definen si podemos seguir en ordenes de prestación de servicios, si podemos trabajar en X o Y evento, si nos dan permiso de subir o bajar las tarifas, si proyectamos seguir en la dinámica comercial, si buscamos participar en concursos o actividades, si le seguimos apostando a mantener tradiciones, cuidando el patrimonio, peleando por principios y calidad, entronizar los ODS, jugando limpio en todo, pero al parecer no hay una luz que nos guie a un destino más o menos fijo, que nos de seguridad, y al parecer serán meses de más y más disparos al aire, sin técnica, sin VAR, sin juego en equipo, sin transmisiones, sin árbitros y sin público adulador.

Tratando de asimilar cada uno de los cambios, a las reglas de juego que se tienen en la FIFA, estamos seguros que se modernizan para cada 4 años de la cita que congrega a patrocinadores, multinacionales, equipos, gobiernos, federaciones, familias, grandes cadenas de televisión, pequeños medios de comunicación, convergentes equipos de trasmisiones, tecnología de punta y hasta mezclar las leyes, normas, tradiciones y costumbres con una serie de comportamientos, que también son en el libre desarrollo de la personalidad, pero no imponiéndolos –menos a la fuerza o con condiciones- sobre las que priman cuando hay anfitriones.

La verdad es que si fuésemos sensatos en cada jugada –que no se repiten o puede hacer desde los 4 o 5 ángulos de los modernos y estratégicos equipos- podríamos concluir, con emocionada narración de profesionales locutores, que nos hacen, hacemos o autoproferimos golazos, sin jugar con indumentaria propicia para ejercer el deporte de las multitudes, de las emociones, de oportunidades para jugadores de su entorno, de “juego limpio” como ejemplo para los de aquí y los de allá y que serán las generaciones que ven en el deporte un mundo mejor y que como hace pocas horas llegó, de nuevo, a la primera división del fútbol nacional, para uno que lleva en su nombre el de Boyacá y con referencia al sector capitalino del Chicó, y que se puede equiparar a la historia de los pequeños, medianos o grandes clubes, que son empresas innovadoras, respetando a quienes les abrieron las puertas para hacer su emprendimiento, más no denigrando o menospreciando a la tierra que les acogió y hoy respalda con apoyo y recursos. Borrón y cuentas nuevas…

No todos jugamos en los tiempos establecidos, a veces necesitamos más o menos minutos adicionales, pero de lo que si podemos asegurar es que no se pueden seguir perdiendo esos segundos para seguir en polarizaciones, que ya hemos puesto en estos pregones, porque seguimos en las lamentaciones de lo que no hicimos en tiempos mejores. Esos vivos que hacen sus goles sin jugar limpio, deben buscar nuevas trincheras porque llega un punto que se pueden estar mereciendo la tarjeta roja, con tantas amarillas acumuladas, faltas no registradas y triquiñuelas lamentables para el erario, para la administración pública, para el respeto por la institucionalidad, para el ejercicio profesional y hasta para unos penaltis con merecimiento frente a rivales de carne y hueso, de mentiras o del más allá.

Que vengan las estrellas para los escudos de los que con orgullo, goles de factura, con “pases” estudiados, deleitan el gusto por un GOL histórico, jugada de campeonato. Que el 18 de diciembre gane el mejor. Que de ahí en adelante se hagan goles a la corrupción, a la intolerancia, a la envidia, a las malas prácticas y haya goleadas por unas regiones de progreso. Jugándonos por una Colombia que sea identidad de lo mejor. *Ricardo Gabriel Cipagauta Gómez. @ricardocipago 

https://boyaca7dias.com.co/2022/11/23/golazos-sin-jugar-ricardo-gabriel-cipagauta-gomez-columnista7dias/

PREGONES ¿Facilismo y la credibilidad?

 ¿Facilismo y la credibilidad? – Ricardo Gabriel Cipagauta Gómez #Columnista7días

16 de noviembre de 2022

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Ya somos en el mundo más de 8.000 millones de habitantes, con clara superpoblación, pocas medidas para controlar dolores como el hambre, la desnutrición, la falta de acceso a servicios públicos, enfermedades, desperdicio de alimentos, afectación al ambiente, inequidad y por ende el recurrir al facilismo para poder justificarse, correr las líneas éticas por placer, imponerse para ser parte de los que mandan, adular para satisfacer a los egos de los mal llamados “jefes”, y con una enfermedad que se convirtió en pandemia, y hasta en sindemia (concentración de dos o más epidemias), como lo advertimos en varias de estas columnas, pero que rebozo la copa de la credibilidad para el ejercicio de la profesión (para unos pocos el oficio) de informar, comunicar y sin ser activistas o pagados por fuerzas extrañas…

La ambición de unos aduladores, que todos ya identifican, señalan y hasta siguen, impusieron –y mañana se van a vanagloriar por haberles dado ese título y de seguro lo usufructuarán para unas fotos, trinos o elocuentes discursos en tarimas o escenarios errados-. Pues ellos son por estos días llamados a eventos oficiales, en su causa personal para volver a usar los bienes oficiales y trastearse con sus corotos y seguir al mando de unos sectores estratégicos y, con la desfachatez que los caracteriza, volver a burlarse con anuncios y titulares.

Pero ya tocamos fondo cuando se plagian, copian, replican y roban noticias, investigadas, trabajadas, contextualizadas y exclusivas –producto de trabajo serio y sin ambiciones- para llevárselas a sus monetizadas y cuestionadas redes sociales o trincheras de contratación, o de pago para hacer el mandado al “jefe” y poder así demostrar que unos cuantos seguidores –incautos- que no tienen por qué saber cómo es que hacen ese sucio trabajo, se lo atribuyen y luego buscan o tratan de negociar el que se les exculpe o disculpe del escenario público, por la indelicadeza, atrevimiento y hasta delito.

Mientras tanto colegas que se han quemado las pestañas y su prestigio, para que en segundos (¿será que el mal tiene raíz en las costosas llamadas facultades o escuelas, que se ufanan de tantos años de entregar a la sociedad títulos a irresponsables, antiéticos, vividores o aventajados -vivos- de lo que no se debe hacerse en el Periodismo, en la Comunicación?) lo pongan sin créditos, sin aclarar la fuente (burdo pantallazo) y mucho menos retirándolas, luego de la vergüenza de ser descubiertos o señalados.

Así no es jóvenes que escogieron esta digna profesión, aunque aprenden con rapidez a salirse las mínimas normas de la Ética, porque así los o nos acostumbraron. Hablemos YA.

Precisar que son contados con los dedos de las manos y no representan a quienes han dedicado su formación a dar lustre a la tarea que la Sociedad nos ha entregado y con quienes tenemos una muy gran responsabilidad, que se hacen urgente comisiones de ética en los pomposos gremios y que ante todo amerita la tan reclamada autorreflexión, como se debe hacer en ciertos niveles o instancias -públicas y privadas- en la autoevaluación o calificación a sus integrantes de juntas directivas, pues no es para hacer mandados a los de turno, sino responderle a quienes los eligieron para representarlos; será otro análisis pregonero.

Poner la cara, no la desvergüenza rampante, incluso en ruedas de prensa, ceremonias, alta facturación en los gobiernos coloridos, facilismo o cuestionable familiaridad -cercanía- en el tratamiento a funcionarios, ventas costosas de la credibilidad para hacerles encuestas, activismo en ciudades donde les “comen cuento” o lo hacen porque les temen, obligan o condicionan -bajo presiones- a estar en premios o inventos de negocios-emprendimientos-, no por respeto o que haya real credibilidad, seriedad y altura para con las audiencias. Las disculpas las presentarán los aludidos.

Todos de seguro hemos tenido fallas en el ejercicio profesional, pero que estas sean, hayan sido o lleguen por haber sido asaltados en la buena fe, error de humano, y no por tener las uñas untadas…

Las emergencias producto de la temporada extendida de lluvias y la falta de previsión, el estar atento al todavía preocupante 64% de ocupación de UCI, a las peleas por figuración hasta en el dolor, y otros tantos temas de la agenda del día a día, pasaron a un segundo plano o un manejo desde las redes sociales -de los 3 o 5 contratados para que hablen o escriban a nombre- de los funcionarios oficiales.

Venimos acabando con los principios (honestidad, confianza, verdad, contexto) que nos inculcaron en las cátedras, en las jornadas de actualización y formación. Favor traducir en otras profesionales o trabajos, donde hay casos iguales o más preocupantes. Todo por la inmediatez, ambición, de mercadear “supuestos productos-noticias-”.

Nunca es tarde para rectificar el rumbo cuando se va a definir una Política Pública de Periodismo, y no seguir graves en credibilidad.

*Por: Ricardo Gabriel Cipagauta Gómez.  @ricardocipago

https://boyaca7dias.com.co/2022/11/16/facilismo-y-la-credibilidad-ricardo-gabriel-cipagauta-gomez-columnista7dias/

PREGONES Desmadre, bumerán y lo que viene

 Desmadre, bumerán y lo que viene – Ricardo Gabriel Cipagauta Gómez #Columnista7días

9 de noviembre de 2022

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En todos los niveles vamos viendo que se nos salió el país, la región, algunos municipios y ciudades y hasta nuestros entornos, de las mentes, manos y políticas que anhelábamos fueran las que pregonando un “cambio” no nos llevará a seguir en contra de todo, criticando y tratando de justificar de todo y ponernos a la defensiva en todo. Respetable que traigan o lleguen con sus líneas pero no a alinearnos.

Y no es que todo sea la política, pero nos tiene atravesado todo. Y duele ver como ya las violaciones se volvieron el pan rutinario, los mensajes solidarios y de dolor –que es lo mínimo de ciertas autoridades- se destacan por su ausencia, o mejor por su no presencia, los asesinatos y abusos van a una cuenta y no pasa nada, los atracos o robos se convirtieron en variados titulares, masivas replicas a videos de cámaras de seguridad y las bajezas con niños no avergüenzan a quienes juraron respetar las leyes, y así no hubieran jurado es que no se compadece en una sociedad que ha sufrido dolores muy fuertes.

No es que hurten un celular, una bicicleta, una lata de atún, un pan, un reloj, es que esas intimidaciones nos enferman, dejan secuelas y demuestran que estamos a la deriva, empezando por cercanías de colegios y comercio.

Ya los triunfos, de quinto, cuarto, bronce, plata u oro no nos llenan como en momentos en que por las noticias nos saciábamos con el solo escuchar que había logros individuales o de grupo, que con muchos esfuerzos llegaban hasta unos niveles de sana competencia, para destacarse, prepararse y dar pasos gigantes hacia cumplir sus ambiciones y retos, pero mediante fríos comentarios o comparaciones insulsas quedan al viento.

En los balances consolidados de autoridades -como de bomberos y policías o cuando se suceden emergencias- que debiesen ser cada 24 horas para que estemos informados, conscientes, adoloridos y por lo menos asombrados, ya es para llevar unas estadísticas (frías) y que en el mejor de los casos llevan a tomar medidas pero los resultados son muy lamentables, y es de donde se agarran para vociferar y atrincherarse, convirtiendo esas situaciones en banderas de modernos y muy producidos videos, campañas, estrategias y lo demás que espere. Y sin acabar con lo que es de todos, o por lo menos para todos.

No dejemos de lado lo que se acrecienta con los precios en los productos básicos, en la comida y medicamentos, algo que ya nos tiene muy restringidos y al borde de hacer “vacas” para comprar por bultos –que logren alcanzar para varios y por buscar reducir costos- y hasta ya se anuncian en sectores para los festejos navideños. No es exageración pero hay que buscarle “la comba al palo…” y es que además se reciben los impactos de la naturaleza con sus fuertes temporadas de lluvias que nos han afectado a todos. No es de decálogos “ventijulieros” sino de cumplir compromisos y protegernos entre conciudadanos.

Y así lo confirman las calificaciones, muy bajas, en el reciente “seguimiento de Noticias RCN y GAD3” a los primeros noventa días de un gobierno que ha convertido su forma de gobernar en formar de politizar, polarizar y poner en bandos a los compatriotas, sin medidas o acciones claras, concisas y con argumentos.

Todo al rompe, o imponiendo no dará resultados sino decepciones y será su bumerán… y en Noticias CARACOL vienen visitando las ciudades para escuchar a los ciudadanos y conocer de primera mano el termómetro que registran el sentir de inconformidades, necesidades y justos reclamos, por lo básico y primordial.

Que no nos vayan a señalar de ser provocadores, sino que de verdad ya nos hemos quedado en silencios -por múltiples factores- que debemos ir traduciendo en propuestas, realizaciones y que se impongan el orden, las normas, las buenas costumbres, rumbos claros y no bandazos para lo que se avecina que es un año lleno de retos, sorpresas, mentiras y verdades y personajes con las mismas.

(*) Agradecer a quienes durante el 2022 han sido lectores de “Pregones” y han permitido estar en los columnistas regionales más leídos, en el estudio de Cifras y Conceptos. Gracias.

* Ricardo Gabriel Cipagauta Gómez.  @ricardocipago

https://boyaca7dias.com.co/2022/11/09/desmadre-bumeran-y-lo-que-viene-ricardo-gabriel-cipagauta-gomez-columnista7dias/

PREGONES Renunciados, pero en campañas

 Renunciados, pero en campañas – Ricardo Gabriel Cipagauta Gómez #Columnista7días

2 de noviembre de 2022

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Hasta hace pocas horas se tenía fijado el plazo para renunciar a sus cargos de aquellos a los que el bicho, enfermedad, negocio, empresa y hasta trincheras se les han incrustado, el saberse voceros, “ungidos-escogidos-impuestos” como los que serán los candidatos para las ya abiertas postulaciones, a cargos de elección popular para ediles, concejos, diputados, alcaldes y gobernador. 

Entre tan esperadas, comentadas, anunciadas, promovidas, lloradas y publicitadas despedidas de sus “obligaciones en funciones públicas” (pagadas con el erario) ya hasta videos lastimeros –con anuncios o promesas de que ahora sí harán por las comunidades- se viene convirtiendo en negocio de unos cuantos para hacerles encuestas, videos, entrevistas, foros, invitaciones, fiestas y homenajes. . . cuando sabemos que llegaron a sus escritorios de donde se despiden –“más que circo de pueblo”- para tratar de “venderse” ante incautos, desprevenidos, aduladores y hasta jóvenes que anhelamos fuesen las nueva dirigencia –liderazgo- de lo local y regional, pero que han pasado 15 o más años y han sido muy inferiores a sus expectativas de hacer nuevas formas de política, cambios, realidades y transformaciones, para seguir con las mismas y mejoradas ( en sus falencias), salvo contadas excepciones, que con los dedos de la mano alcanza.

Ya están en campañas o por lo menos promoviendo sus aspiraciones, en legítimo derecho. Es lamentable que sigan las mismas prácticas que pudieran mejorarse por las nuevas generaciones de profesionales, de expertos en tecnologías de la información y las comunicación y que debiesen poner al servicio comunitario las enseñanzas de las especialidades de la administración pública, aunque en la mayoría de las veces es porque no les dan espacios, oportunidades, o un cargo digo de sus títulos, para demostrar que se puede manejar lo público con pulcritud, altura, responsabilidad y seriedad. 

No solo por unas horas, meses o años, en carrera y no a las carreras. Siendo honestos con los congéneres, con sus principios de familia y llegando a desempeñarse sin triquiñuelas. No para acumular renglones llenos de funciones a desarrollar y ya fuera de los cargos tratar de mostrarse como los “sacrificados” de sus jefes superiores y que no les dieron la holgura para ayudar a sus conocidos, aduladores, apoyos y cumplirle a quienes defendieron causas o ejecutar ofrecimientos y que se van volviendo en  desudas sociales y políticas.

Hoy ya hacen parte de los carteles de renunciados, por voluntad, a la fuerza o por fuerzas de otros, que los van poniendo en sus sitiales para desde allí ser los que definen causas generales, pero con sus intereses de primero. 

Y que no es que no tengan derecho, así lo consagran la constitución y las leyes, pero ya dejen espacio a los que están preparados para administrar los recursos de todos, y no hay ninguna obligación de volverles a elegir, o por el que éste o aquel nos impongan y mucho menos a que en el por salir de compromisos tiene que ser el que nos va a regir en destinos y futuro, y mucho menos con honores ganados a costillas de “paisanitos del alma” –y otras tantas frases manidas y tejidas con las necesidades- y que hoy ya como ex, deberían estar dedicados a sus hogares y sus integrantes. 

Se avecinan las fiestas del fin de año y serán las fechas para enviar sus saludos, llegar con sus regalitos para niños, y buscando que se formen grupos de apoyo o trabajo para hacerse elegir y seguir en la ruleta que se ha salido de eje para llegar a manejar las chequeras de respetable entidades y que las convierten las cajas menores de sus proyectos –personalistas- y dejando a los activistas en el asfalto.

Algunos citan o invitan para dar explicaciones del porqué de su decisión…. Así es como ganan espacio en medios de comunicación y redes sociales o “bodegas” y tratan de justificarse, que con micrófonos abiertos, páginas y lentes abiertas se ahorran unos pesos o cuando invierten es con ciertos personajes que han venido dañando la comercialización que serviría para la sostenibilidad de los

canales -que reiteramos serían para una Sociedad Informada en Democracia- y definiendo el voto que dentro de un año estaremos emitiendo con libertad, pero con absoluta madurez, individual y colectiva, que hay que asumir. 

Por extrañas coincidencias suenan ruidos de caravanas, desordenadas, escandalosas y hasta salidas de madre, con grandes pasando por niños… y con disfraces que alegran horas, pero que mañana ya son recuerdos y así es que hemos vivido décadas y cada que llegan las elecciones nos volvemos a poner dignos y profetizamos de nuestros deberes y derechos, que bueno hacerlo a conciencia. Siempre hay una primera vez.

https://boyaca7dias.com.co/2022/11/02/renunciados-pero-en-campanas-ricardo-gabriel-cipagauta-gomez-columnista7dias/