Delegar todo para no asumir nada – Ricardo Gabriel Cipagauta Gómez #Columnista7días
Ahora resulta que los dirigentes, jefes, ordenadores del gasto y cada uno de nosotros, en algún momento de nuestras agitadas vidas, no somos capaces de responsabilizarnos de lo que se nos asigna o en el mejor de los casos tenemos las excusas para justificarnos o señalar a otros de esto o aquello; y se volvió costumbre en las entidades públicas y sus funcionarios para sacar el cuerpo.
Que nos hemos modernizado en los sistemas oficiales de PQRF (peticiones, quejas, reclamos, felicitaciones) y hasta han creado un rincón en sus páginas electrónicas, tienen unidades móviles -con funcionarios expertos- y hasta realizan jornadas para que la ciudadanía se comunique, si se siente afectada, pero se les olvida lo esencial: hablar o comunicarse mirando a los ojos, cara a cara como los que enfrentan, en estrados judiciales, aquellos que se han pasado de revoluciones o mentiras, aprovechándose de apellidos o padrinos, y los arrogantes que asumen ser dueños de nada… pero que caen para arriba y hasta ya son jefes de los jefes que reemplazarán en pocos días.
Estudiosos y expertos ya hablan de hipengiofobia o hipengiafobia como esa sensación de miedo permanente, llegando a la obsesión, en muchos de los casos rayando en lo irracional y que para consuelo de tontos es casi una enfermedad, para situaciones, cosas, tareas, cargos, coordinaciones, retos y hasta ejercer las potencialidades de la profesión. Miedo hasta ser puntuales en una cita…
La responsabilidad no puede generar temores, por el contrario, debe darnos impulso para cumplir. Y es que hizo carrera que ya no llegan a los controles políticos en concejos o asambleas (así sea de las administraciones del edificio), y qué decir de las excusas absurdas y muy sustentadas para evadir sus responsabilidades como representantes a la cámara o senadores.
Mejores ejemplos son los que los medallistas, en los juegos nacionales, en los panamericanos y parapanamericanos, nos emocionan con sus preseas de bronce, plata, oro y hasta con las esmeradas clasificaciones frente a muy exigentes competidores, que dan ejemplo de pundonor. Y no podemos dejar de reconocer el trabajo de nuestros hermanos en las fuerzas militares, en la policía, en la fuerza aérea, en la marina y en sectores como el de la medicina, de la educación, de la justicia, los medios de comunicación; pero los que se sientan aludidos debería ser y pensar-actuar- como los directores técnicos, con sus resultados, empatando, perdiendo o ganando con altura, con dignidad.
Sólo nos resta esperar que los que llegan a gobernar, el torero y su cuadrilla, asuman ésa identidad que los va a hacer de buen recibo para quienes les dieron el voto y para los que no, porque empezar a echar culpas a los que ya se van no tiene fundamento, entonces volvernos a preguntar: ¿por qué tanta ambición por llegar? Aprender de la resiliencia de los artistas y sus expresiones en los escenarios. Cada uno tiene una tarea y así se reflejará con los aplausos o rechiflas, en 4 años. Tareas.
Que no nos decepcionen con no asumir nada de frente, con las riendas agarradas, y si van a delegar es porque sus indicaciones son pensando en todos y no en intereses que con el paso del tiempo, en la tarea del periodismo, se verán sus verdades y saldrán a flote y de seguro les incomodará.
Delegar todo no es para lo que los elegimos o salieron elegidos. Vamos a ser muy estrictos en los controles a los trabajos que son su compromiso, su obligación, y directo a mejorar y ser grandes…
*Por: Ricardo Gabriel Cipagauta Gómez. @ricardocipago
https://boyaca7dias.com.co/2023/11/22/delegar-todo-para-no-asumir-nada-ricardo-gabriel-cipagauta-gomez-columnista7dias/
No hay comentarios:
Publicar un comentario